Las multinacionales deberán informar sobre los impuestos que pagan en cada país 

  • Se aplicará a compañías con una facturación anual global a partir de 750 millones de euros
  • La información incluirá los impuestos pagados fuera de la UE
  • Las empresas que no cumplan podrán ser sancionadas

El Parlamento quiere que las grandes multinacionales hagan público cuántos impuestos pagan y dónde, aunque acepta excepciones en caso de información comercialmente sensible.

El pleno respaldó el martes una propuesta por la que las compañías con una facturación a nivel mundial a partir de 750 millones de euros tendrán que informar sobre sus contribuciones tributarias, de manera desglosada por país. El objetivo de la norma es incrementar la transparencia fiscal y combatir la evasión.

El proyecto legislativo prevé sanciones para las empresas que no faciliten la información, que fijará cada Estado miembro y que pueden consistir en multas administrativas y en la exclusión de los procedimientos de licitación pública y de concesión de financiación procedente de los fondos estructurales de la Unión.

Formulario común

La información tributaria se incluirá en un formulario estándar, disponible de manera gratuita, y que deberá publicarse en la página web de la empresa. La compañía también estará obligada a enviar un informe detallado a un registro público gestionado por la Comisión Europea.

Entre los datos que deberán hacerse públicos:

  • nombre de la empresa y, en su caso, de todas sus filiales, una breve descripción de sus actividades y de su localización geográfica;
  • número de empleados (puestos equivalentes a tiempo completo);
  • facturación neta;
  • capital declarado;
  • los activos fijos;
  • beneficio (o pérdidas) antes de impuestos
  • importe pagado en impuestos por la empresa y sus filiales en cada jurisdicción fiscal;
  • ganancias acumuladas, y
  • si la empresa os sus filiales se benefician de algún trato fiscal preferente.

Los eurodiputados también respaldaron medidas para proteger la información comercialmente sensible, al permitir a los Estados miembros autorizar excepciones a la obligación de facilitar la citada información. Estas excepciones tendrán que ser renovadas anualmente, y sólo afectarán a la jurisdicción del Estado miembro que las concede.

Tras aceptar una excepción, el país debe informar a la Comisión Europea de manera confidencial sobre la información omitida, junto a una justificación detallada. Cada año, la Comisión publicará en su página web una lista de las empresas que se benefician de ese tipo de excepciones, con una explicación sucinta del porqué.

Límites a las excepciones

 El Parlamento incorporó varias enmiendas para restringir el alcance de las excepciones. Así, las empresas que pierdan el derecho a reservarse cierta información, tendrán que hacerla pública de manera inmediata. Tendrán, además, que solicitar cada año la renovación de la excepción.

 Por último, al final del periodo de confidencialidad, la compañía deberá publicar la información omitida de manera retroactiva, “en forma de media ponderada”, para cubrir el tiempo en que no estuvo obligada a ofrecer los datos.

Próximos pasos

El proyecto legislativo recibió 534 votos a favor, 98 en contra y 62 abstenciones. El texto fue devuelto a las comisiones de Asuntos Económicos y Asuntos Jurídicos, para iniciar negociaciones con el Consejo con vistas a acordar la formulación definitiva de las normas.

Declaraciones de los ponentes

Evelyn Regner (S&D, Austria) señaló: "Si no obligamos a publicar la información país por país, nunca arrojaremos luz sobre el sistema de empresas buzón del que se sirven algunas compañías para ocultar sus beneficios y evadir impuestos. Estamos preparados para negociar con el Consejo para pactar un régimen común. La UE debe liderar la lucha contra la elusión fiscal.”

Hugues Bayet (S&D, Bélgica) agregó: "Cada euro de impuestos no pagado por las empresas, es un euro de más que pagan los particulares”.

Datos

La Comisión Europea calcula que la evasión fiscal por parte de las empresas cuesta a los países  de la UE entre 50.000 y 70.000 millones de euros anuales en ingresos perdidos.

Procedimiento legislativo ordinario, primera lectura

Fuente: Parlamento Europeo (05/07/2017)