A la vista interpretación del Supremo sobre si las sociedades de profesionales responden a una simulación con fines tributarios

La recurrente –una conocida firma de abogados- entiende que facturar a través de sociedades profesionales resulta perfectamente legítimo, en la medida en que son el vehículo perfecto para «diferenciar las actividades y responsabilidades de los abogados, permitiéndoles acogerse al régimen de responsabilidad limitada»; no se trata en su opinión de conseguir una ventaja fiscal, lo que le es negado por la Administración tributaria.

Pues bien, resulta conveniente un pronunciamiento del Tribunal Supremo que determine si puede apreciarse la existencia de simulación en el ejercicio de una actividad profesional a través de una sociedad expresamente constituida para facturar los servicios prestados y, en caso de no poder declararse la existencia de simulación, precisar cómo ha de calificarse el ejercicio de esa actividad profesional.

(Tribunal Supremo, 10 de mayo de 2018, recurso n.º 6108/2018)